Ecuador ordenó este miércoles suspender dos días las labores públicas y privadas, ante la crisis energética causada por un déficit histórico en los embalses que abastecen las hidroeléctricas, lo que derivó en apagones de hasta seis horas.
El mandatario Daniel Noboa decretó la “suspensión de la jornada laboral” el jueves y el viernes, señaló la presidencia en un comunicado y advirtió que la decisión no solo responde “a circunstancias ambientales” sino a “actos inauditos de corrupción y negligencia.
Ante intempestivos racionamientos del pasado domingo, Noboa encargó el martes la cartera de Energía al titular de Transporte y Obras Públicas, Roberto Luque, y ordenó una investigación ante sospechas de corrupción que afectaría la producción de electricidad.
La presidencia precisó que los sectores estratégicos del Ejecutivo “estarán operativos y enfocados al 100% en la tarea de la resolución de la crisis energética” durante el asueto obligatorio.
Las centrales eléctricas realizarán durante el jueves y viernes mantenimientos de sus plantas, lo que implicará racionamientos que serán anunciados oportunamente, añadió. Colombia dejó de exportar energía a Ecuador como medida para lidiar con la grave sequía asociada al fenómeno El Niño que tiene los embalses de ese país por debajo del 30% de su capacidad.
Frente a la crisis energética, Noboa indicó el martes que en abril se cobrará solo 50% de la factura de luz de los hogares.