Se instaló en Caracas, Venezuela del cuarto ciclo de conversaciones de paz entre el gobierno colombiano y el ELN, que contó con la presencia de los países garantes y acompañantes, el representante de la ONU, Carlos Ruiz Massieu, la Iglesia Católica y por parte del país anfitrión, Delcy Rodríguez, vicepresidenta de Venezuela.
El foco será la población civil afectada por el conflicto armado. Le han llamado el ciclo de la gente a esta cuarta ronda de conversaciones de paz. Quieren pasar de lo nacional a lo territorial. Así lo explica Otty Patiño, jefe de la delegación del gobierno.
“La gente que vive en los sectores más afectados por el abandono y la violencia, empecemos a escuchar en vivo y en directo las voces de las víctimas, empecemos ya a comprometer a los otros actores que se disputan esos territorios, que en este ciclo hagamos planes concretos donde participen los jefes de los frentes de guerra del ELN y las comunidades de esos territorios”.
Por su parte Pablo Beltrán, jefe de la delegación del ELN, aseguró que hay una convicción por lograr una solución política al conflicto y que en la mesa lo que se firma se implementará inmediatamente.
“La consigna que nosotros no nos cansamos de repetir es que construyamos una visión común de paz. No es la del gobierno, no es la del ELN, es la de todos y que nadie se quede afuera. En ese sentido, seguimos trabajando, porque en la medida de que esto avance, va a haber más confianza de la sociedad colombiana hacia este proceso”.
En este cuarto ciclo que se extenderá hasta el 4 de septiembre las partes avanzarán en una hoja de ruta para llevar alivios humanitarios a las zonas más afectadas por el conflicto armado.