La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) emitieron una alerta para Colombia, Honduras y Haití, tras identificar que la inseguridad alimentaria aguda se agravará en estas naciones entre febrero y mayo del 2022.
En el informe titulado Focos de Hambre, se indica que Colombia es el único país suramericano con esta alerta y se advierte que el hambre ganaría terreno en el país (afectando también a migrantes venezolanos) por cuenta de una combinación de problemáticas. Según el estudio, la inestabilidad política y social, la crisis migratoria regional, el desplazamiento interno, la violencia, el impacto de la pandemia, los retrasos en la implementación del acuerdo de paz y el poco acceso de asistencia humanitaria causarán una crisis de hambre.
La proyección para el 2022 es que 7,3 millones de colombianos necesitarán asistencia alimentaria, lo que podría incrementar el malestar social. A su vez indican que podría haber “baches económicos” causados por las campañas electorales que perjudicarán la situación de hambre.
La FAO y el PMA concluyen recomendando al gobierno colombiano tomar medidas como “transferencias de efectivo y la asistencia alimentaria tanto para los migrantes venezolanos como para las comunidades de acogida”.
A su vez se sugiere “la distribución de insumos agrícolas y el establecimiento de áreas para la producción rápida de alimentos, atención médica veterinaria, apoyo a la producción de forraje y ayuda para preservar los medios de vida”.
