El presidente Joe Biden emitirá un decreto que exige a los desarrolladores de inteligencia artificial estadounidenses, entre otras cosas, presentar al gobierno federal proyectos que supongan riegos para la seguridad nacional, económica y de salud pública del país.
El decreto está basado en otro de los años 80, expedido durante la Guerra Fría, en el que se le otorga poder al gobierno de coaccionar empresas cuando está en juego la seguridad del país.
Desde la casa blanca buscan centrarse en el desarrollo de inteligencias artificiales en los campos biotecnológicos y de infraestructura, además esperan emitir recomendaciones sobre la detección e identificación de material generado por inteligencias artificiales.
Aun así, con el decreto la administración no tendrá un gran poder de acción, ya que una política amplia de regulación sobre las empresas debe pasar por el congreso, que en este momento está dividido por las elecciones venideras.