Brian Nichols, Subsecretario del Departamento de Estado, reconoció desde la Organización de Estados Americanos los resultados de las actas presentadas por la oposición, aceptando así la victoria de Edmundo González Urrutia en las elecciones de Venezuela e invitó a otros estados a hacer lo mismo.
Nichols aseguró que la razón por la que el oficialismo no ha mostrado las actas es porque González habría ganado con una amplia ventaja y el anuncio del Consejo Nacional Electoral, sobre la reelección de Nicolás Maduro no tendría ningún valor.
Nichols le da validez a las actas electorales compartidas en internet por organizaciones de la sociedad civil y la oposición, que afirma haber sufrido un fraude, y aseguró: “Está claro que Edmundo González Urrutia derrotó a Nicolás Maduro por millones de votos”.
El encargado del Departamento de Estado de EE.UU. para Latinoamérica, Brian Nichols, afirmó este miércoles que existe evidencia “irrefutable” para declarar la victoria del candidato opositor, Edmundo González Urrutia, en las elecciones presidenciales de Venezuela del pasado 28 de julio.
“Con la evidencia irrefutable basada en las actas de votación, que todo el mundo puede ver, está claro” que el político opositor “derrotó a Nicolás Maduro con millones de votos” de ventaja, señaló el diplomático ante el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA).
María Corina Machado agradece el respaldo de ocho cancilleres en el Consejo de la OEA
La líder antichavista María Corina Machado agradeció el respaldo de los cancilleres de Ecuador, Uruguay, República Dominicana, Chile, Argentina, Perú, Paraguay y Panamá durante la sesión extraordinaria celebrada este miércoles por el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA), durante la que fracasó una resolución que exigía a Venezuela revelar las actas de los recientes comicios.
A través de distintos mensajes publicados en la red social X, Machado expresó su agradecimiento a la ecuatoriana Gabriela Sommerfeld, al uruguayo Omar Paganini, al dominicano Roberto Álvarez, al chileno Alberto van Klaveren, a la argentina Diana Mondino, al peruano Javier González-Olaechea, al paraguayo Rubén Ramírez y al panameño Javier Martínez-Acha Vásquez.
Estos países, además de Canadá, Costa Rica, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Guyana, Haití, Jamaica y Surinam, votaron a favor de un texto que instaba al Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela a publicar “inmediatamente los resultados de la votación” en cada mesa electoral.
También que “se lleve a cabo una verificación integral de los resultados en presencia de organizaciones de observación independientes para garantizar la transparencia, credibilidad y legitimidad de los resultados”.
La resolución, sin voto alguno en contra, pero con abstenciones, declaraba “una prioridad absoluta salvaguardar los derechos humanos fundamentales en Venezuela, especialmente el derecho de los ciudadanos a manifestarse pacíficamente sin represalias”.
Se abstuvieron Antigua y Barbuda, Bahamas, Barbados, Belice, Bolivia, Brasil, Colombia, Granada, Honduras, San Cristóbal y Nieves, y Santa Lucía, y no participaron en la sesión Dominica, México, San Vicente y las Granadinas, y Trinidad y Tobago, además de Venezuela, ausente desde hace tiempo.
El lunes, el CNE declaró ganador al presidente Nicolás Maduro por poco más de 704.114 votos frente al abanderado de la principal coalición opositora -la Plataforma Unitaria Democrática (PUD)-, Edmundo González Urrutia, cuando faltaban por computar más de dos millones de votos, que podrían cambiar los resultados finales.
La PUD asegura disponer de más del 80 % de las actas, las que -asevera- otorgan la victoria a González Urrutia por un amplio margen, y que los ciudadanos que votaron pueden consultar en una página web que habilitó el sector opositor, para lo que necesitan, únicamente, su número de documento de identidad.
El Centro Carter, que participó como observador en los comicios, manifestó este martes que el proceso “no se adecuó” a los parámetros y estándares internacionales de integridad electoral, por lo que “no puede ser considerada como una elección democrática”.