A dos meses de cumplirse la creación del Comité pro Defensa de Inversión del Hospital San Vicente de Arauca no se ha dado cumplimiento a los compromisos adquiridos por el gobernador del departamento de Arauca, Ricardo Alvarado Bestene, dijo uno de sus voceros, Renso René Coronado Gámez y por el contrario, la institución y la situación de los empleados está al borde del colapso.
De las exigencias, a la fecha no se cuenta con un director en propiedad, los recursos prometidos de 8 mil millones de pesos para pago de sueldos de los trabajadores, insumos aún no ha llegado, no se ha contado con un informe de inversión solicitado al director encargado, Jair Albeiro Cedeño Parales, el que no se tiene de una forma clara.
Coronado Gámez, reveló que el pasado domingo el director encargado presentó un informe sobre 4 mil 700 millones de pesos, donde incluía el 40% de los 8 mil millones de pesos en el proyecto de actividades públicas, pero también se encontró una recuperación de cartera por 1.400 millones de pesos.
Al verificar esta información, explicó Coronado Gámez se encontró que la firma Saludcobro con sede en Cartagena, serán quienes van a entregar esos recursos, pero que todavía no tiene como girarlos al hospital, convirtiéndose esto en un círculo vicioso y no se han tenido los resultados esperados para transformar o cambiar al hospital porque se está en una crisis y lamentable la situación de los empleados tanto en la parte científica, especialización, profesionales y las diferentes área, en especial la parte asistencial.
Reveló Coronado Gámez, que ningún establecimiento público, entre ellos supermercados, Emserpa, Enelar le quieren dar crédito a los trabajadores del centro asistencial, por lo que con un grupo de empresarios que están preocupados por esta situación trabajan con una base de datos para conocer el número de funcionarios que requieren de un mercado humanitario y de ayuda porque ya nadie les quiere dar fiado a los trabajadores del centro asistencial.
Explicó Renso Coronado, que cuando se encuentra toda esta inestabilidad en la parte de gerencia, en el no pago de los salarios por contrato, de nómina, lo que evidencia es que el Hospital San Vicente está afrontando una crisis profunda.
Ante este panorama, se ha programado un plantón para este jueves 4 de agosto frente a las instalaciones de la gobernación a partir de las 8:00 de la mañana, donde participarán todos los trabajadores y a la que espera se unan los usuarios del centro asistencial.
En este sentido, Coronado Gámez pidió a la comunidad araucana a brindar este apoyo a los trabadores del Hospital San Vicente que todos los días tiene que sacrificar a su familia para ir a prestar un servicio que a la fecha no ha sido remunerado porque a los empleados por contrato o por OPS les adeudan entre tres y seis salarios.
A los integrantes del Comité Pro defensa de la Inversión del Hospital San Vicente también le preocupa las deudas que tiene el centro asistencial por concepto de servicios con balance a 30 de junio fue falsa y errada, señalando que de los 270 millones de la deuda con Enelar a fecha de hoy corresponde a 572 millones de pesos, donde los entes de control han estado ajeno a esta realidad ni han tomado acciones disciplinarias, penal o administrativa para tomar estos correctivos, situación que ha llevado a que se presente esta crisis en el Hospital San Vicente de Arauca.
Adujo en señalar Coronado Gámez, que la falta de un gerente en propiedad, la ingobernabilidad, que un gerente no le copie ni acate las órdenes del gobernador no podrá continuar girando los recursos para que se malgasten, aclarando que en la entidad de salud nadie da explicaciones de los recursos que se invierten, por lo que Coronado Gámez invitó al gobernador Ricardo Alvarado Bestene para que cumpla con la palabra empeñada el pasado 7 de junio, que iba a sacar al hospital adelante, que no permitiría que lo liquidaran o lo intervinieran, jurando ante Dios, su señora madre y el pueblo araucano que en caso dado terminaría renunciando a su cargo como mandatario.
Coronado Gámez, exhortó al mandatario a nombrar un director en propiedad y sacar adelante en compañía de los trabajadores y la comunidad araucana que se merece un hospital digno que garantice la vida.
