En el campo de paradas del Batallón de Artillería N.° 18 “General José María Mantilla” del centro poblado de Puerto Jordán, municipio de Arauquita en el departamento de Arauca, se realizó la entrega de esta Unidad insignia de la Artillería Militar, que tiene la responsabilidad de brindar seguridad y tranquilidad en los municipios de Arauca, Cravo Norte y el Centro Poblado de Puerto Jordán. En una solemne, simbólica y atípica ceremonia militar, presidida por el Jefe de Estado Mayor y Segundo Comandante de la Décima Octava Brigada del Ejército Nacional, llega el Teniente Coronel Julian Guillermo Ceballos, evento que acató las medidas de bioseguridad para la prevención y contención de la emergencia sanitaria de la Covid–19.
Este oficial del arma de artillería, oriundo de la ciudad de Armenia, Quindío, con más de 20 años de trayectoria militar y quien ha ocupado cargos como de Ejecutivo y Segundo Comandante del Batallón de Artillería N.° 27, Instructor de la Escuela de Armas Combinadas, Instructor de Escuela de Policía Militar, Comandante de Compañía del Batallón de Policía Militar N.° 4, entre otros, se destacó como un oficial caracterizado siempre por su abnegación y entrega a la institución que representa.
Le entrega el cargo el Teniente Coronel Luis Ernesto Ramírez Suarez, el cual después de un año y seis meses, tras cumplir a cabalidad con la ardua labor de liderar hombres altamente disciplinados en busca permanentemente de la excelencia para el cumplimiento de la misión, ofreció un sentido discurso de agradecimiento a los asistentes a la ceremonia por el apoyo y respaldo en el trabajo mancomunado en pro de la población en esta región del país y expresó su admiración a las tropas desplegadas a lo largo y ancho de la región por su lealtad y sacrificio durante el tiempo que tuvo el honor de comandarlos.
El Batallón de Artillería N.° 18 continuará adelantando operaciones militares contundentes en esta región del país, trabajando en acción unificada con las instituciones públicas y privadas, con el fin de garantizar la seguridad y la tranquilidad de los araucanos.
