En el día mundial de la infancia UNICEF, la embajada de Canadá, revelan en un informe que el reclutamiento de niñas, niñas y adolescentes en el marco del conflicto armado ha aumentado un 300% en los últimos cinco años en Colombia.
Según el documento del secretario general de naciones unidas sobre el conflicto armado, entre 2019 y 2024 , más de 1.200 niños, niñas y adolescentes fueron sacados y sus hogares, sus colegios, sus comunidades, para ser utilizados en la guerra.
Las cifras también muestran que entre 2023 y 2024, el reclutamiento de menores aumentó un 64%, con 453 verificados en el año anterior, es decir, cada 20 horas en promedio, un niño, niña o adolescente fue reclutado utilizado por parte de los grupos armados ilegales.
“Muchas de estas personas reclutadas viven en zonas afectadas por grupos armados con altos niveles de pobreza. También notamos problemas de desescolarización de los niños, que se ven muchas veces engañados por grupos armados para juntarse a las filas de estos grupos”, explicó Julien Hayois, especialista de protección en UNICEF.
La infancia y adolescencia de comunidades indígenas y afrodescendientes es las más afectada por el reclutamiento, representando el 52% de las víctimas de los últimos dos años.
Según datos verificados por Naciones Unidas, los departamentos de la costa Pacífica como Cauca, Nariño y Chocó, y la frontera con Venezuela, Arauca y Norte de Santander, son los más afectados, aunque también se ha identificado un aumento de violaciones contra la niñez en regiones como la Amazonía y el Caribe.
Falta de recursos disminuye la capacidad para verificar casos de reclutamiento
La representante de UNICEF en Colombia, Tania Chapuisat, advirtió que en medio de este panorama, también influye la disminución o falta de financiamiento de las ONG y diferentes organizaciones, que contribuyen a verificar casos de reclutamiento para incluirlo en el informe, y puede que cada año los casos disminuyan, pero no necesariamente dejan de presentarse.
“Tenemos también una preocupación que va bajando, que el año que viene se puede que bajen números, pero los números no es en realidad que se bajan, es mucho más, y es que hay menos capacidad en todo el territorio para verificar los casos de una manera muy consistente”, dijo Tania Chapuisat.

