Esta semana la Unesco advirtió que solo un tercio de los alumnos del mundo van a volver a clases presenciales, debido a la pandemia del COVID-19. Mary Guinn Delaney, asesora regional de educación, salud y bienestar para América Latina y el Caribe de la Unesco. La vocera dijo que el panorama en la región es más delicado con relación al resto del mundo y aseguró que incluso serán mucho más altas las cifras de quienes no regresarán a clases.
La gran inquietud es si ¿recomiendan desde Unesco un pronto regreso a las clases? Delaney dijo que no es lo más aconsejable, pues hay que tener en cuenta las orientaciones y normas sanitarias en cada sitio, sin hacer recomendaciones generales, porque se debe tener en cuenta la realidad epidemiológica de cada lugar.
“Nuestra recomendación como Unesco es: la seguridad ante todo. (…) Como sistema de naciones unidas estamos formulando con la OMS, Unicef y el Programa Mundial de Alimentos, orientaciones para ayudar a prepararse a las autoridades en los ministerios de Educación, a directores y a profesores en establecimientos educativos”.
Pese a esas recomendaciones, ella reconoció que habrá un daño y un efecto negativo al tener los colegios cerrados, ya que para muchos niños y niñas, este es un lugar seguro de protección: “Es importante identificar a los niños y niñas que presentan rezagos y que muestran señales de haberla pasado mal en casa (…) habrá que trabajar en servicios de protección social para asegurar que el daño hecho sea de corto plazo y se pueda ayudar a remediarlo”.