La Comisión Europea propuso el martes a los 27 países de la Unión Europea (UE) endurecer las sanciones contra Moscú, dejando de comprar carbón ruso y cerrando los puertos europeos a los barcos operados por rusos. «Es necesario claramente aumentar aun más nuestra presión», estimó la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, en el marco de un endurecimiento tras el descubrimiento de numerosos cadáveres en la región de Kiev, la capital de Ucrania, tras el repliegue de las tropas rusas.
Los países de la UE están bajo presión para golpear a Rusia en el sector de la energía, que para Moscú representa la principal fuente de financiación de la guerra. La Comisión, órgano ejecutivo de la UE, propone también incrementar las sanciones bancarias y prohibir la exportación a Rusia de materiales y componentes industriales cruciales para ese país, como los semiconductores avanzados, por un valor de 10.000 millones de euros (11.000 millones de dólares).
Está en estudio igualmente la ampliación al vodka y otros productos rusos la lista de ítems cerrados a la importación en la UE. La propuesta de la Comisión será presentada a los 27 Estados miembro de la UE, con la expectativa de que se apruebe el miércoles.
Hasta ahora los países europeos con mayor dependencia de las importaciones energéticas rusas, como Alemania, Austria e Italia, resistían a poner fin a sus compras de gas y petróleo de aquel país.