El Tribunal Superior de Arauca ratificó las sanciones contra dos directivas de la Nueva EPS por incumplir una acción de tutela que ordenaba garantizar medicamentos e insumos esenciales a una niña de 8 años, diagnosticada con parálisis cerebral, epilepsia, microcefalia y desnutrición severa.
Las funcionarias sancionadas son Hesith Carolina Zárate Torres, gerente zonal en Arauca, y Lauren Johana Rico Gutiérrez, gerente regional Nororiente, quienes deberán cumplir 20 días de arresto y pagar 10 salarios mínimos legales mensuales vigentes cada una.
El caso también fue remitido a la Fiscalía, Procuraduría y Supersalud para las investigaciones correspondientes.
Un fallo reiteradamente ignorado
Pese a la orden judicial y a las sanciones confirmadas, la Nueva EPS no ha cumplido a cabalidad con lo exigido. La entidad únicamente entregó 120 pañales y pañitos húmedos, pero continúa sin suministrar medicamentos anticonvulsivos, toxina botulínica ni el suplemento nutricional indispensable para la menor, quien tiene condición de sujeto de especial protección constitucional.
La persistente omisión pone en riesgo la salud y la vida de la niña y evidencia —según los documentos judiciales— un patrón de indiferencia administrativa que prolonga el sufrimiento de la menor y su familia.
Un llamado urgente al cumplimiento
El Tribunal dejó claro que la atención requerida no es una concesión, sino un derecho fundamental. Mientras la EPS continúa sin acatar plenamente la orden, la menor sigue enfrentando barreras que nunca deberían anteponerse a un caso de esta gravedad.
Las autoridades competentes deberán determinar ahora las responsabilidades penales y disciplinarias que podrían derivarse de este nuevo desacato.

