Frente a la tendencia nacional que algunas administraciones locales han tenido para contrarrestar el fenómeno del maltrato animal a expensas de carretas que son maniobradas con la tracción de equinos, el Instituto de Tránsito y Transporte de Arauca ha recomendado a los alcaldes de la jurisdicción que se adopten medidas con el fin de buscarle alternativas a quienes se dedican a esta actividad.
Reconoce el director del instituto de tránsito, Freddy Serrano Díaz, que si bien este no es un proceso rápido y sencillo, bien puede adoptarse con el tiempo hacia una política pública, una sana medida que promueva el reemplazo de las denominada “zorras” que además de auspiciar en la mayoría de los casos, maltrato animal, son sin duda otro problema asociado al tema de la movilidad.
La idea sostiene el funcionario, es buscar que con el apoyo de profesionales de las áreas veterinaria se analice el estado de los animales que a diario trabajan sobre las vías, que se establezca la posibilidad de recepción, valoración, tratamiento, alojamiento y entrega a los posibles adoptantes de los caballos y que a la par se ofrezca una posibilidad de cambio de vehículo, a quienes en la actualidad garantizan el sustento de sus familias bajo esta modalidad de trabajo.
Insiste tránsito que el tema no es sencillo pues para nadie es un secreto que algunos conductores de vehículos de tracción animal no respetan las señales, a lo que se suma no es fácil una solución en épocas de austeridad del gasto y complejidad en el manejo de los recursos, sin embargo ya son muchas las localidades del país donde se vienen llevando a cabo actividades para promover esta solución al tema de la movilidad, y que sabemos revisarán los dispuestos alcaldes del departamento.
Hay zonas del país donde los mal llamados “zorreros”, están recibiendo a cambio un vehículo motorizado, a bajo costo, para continuar con su labor económica, y esta es simplemente una idea que antes que auspiciar una polémica pública, busca plantear soluciones para hacer de esta una región próspera, ordenada y con garantías igualitarias para todos los seres vivos que en ella habitamos.
Los vehículos de tracción animal han transitado por años en las calles de los municipios de Arauca y del país, lo que supone un planteamiento no con el fin de romper barreras culturales, sino mejorar las condiciones de vida de todos los araucanos.