El presidente Gustavo Petro lanzó una advertencia sobre el aumento de la gasolina en el país, lo cual ha sido una constante desde que llegó al poder. Esta situación, aunque le ha causado varias críticas, ha sido catalogada por expertos como ‘necesaria y responsable’ debido a la urgencia de “disminuir el significativo impacto fiscal en el Gobierno por la dinámica de los precios internacionales de los refinados”.
La advertencia que envió hoy el mandatario fue en respuesta a las críticas del senador del Centro Democrático Miguel Uribe, por estas alzas al precio de la gasolina: “Me decían populista y esto sí es puro populismo y del peor. Si lo que propone este senador se hiciera y no subieramos la gasolina, Ecopetrol quebraría, porque la compró en el exterior cara y la vendería barata o subsidiaríamos a Ecopetrol con el presupuesto”.
Esa eventual reducción en el presupuesto, explicó Petro “implicaría bajar a la mitad el presupuesto de la inversión pública y condenar la economía nacional a la recesión. Peor aún, la inflación y el déficit en el pago de la gasolina se creó en el gobierno que él mismo senador apoyó”.
Por eso mismo, el jefe de Estado indicó que “estructuralmente la inflación comienza en Colombia por las importaciones de maiz y fertilizantes cuyos precios en dólares suben por la guerra y el desabastecimiento mundial. Colombia producía su maiz pero los amigos del senador decidieron importarlo, y Colombia producía los fertilizantes en Monómeros pero decidieron robarse la empresa”.
En medio de estos aumentos, el Gobierno ha tenido que ceder con algunos gremios que se han visto afectados, entre ellos los taxistas. Para estos conductores se anunció que se trabajaría en una tarifa diferencial, y que mientras tanto para ellos los aumentos no se realizarían, es decir, quedaría congelado el valor actual.
