Una dura puja, que parece más bien un reality show de cocina, se está evidenciando entre la labor social del Alcalde (d) Carlos Alberto Hurtado y la Secretaria de Gobierno Departamental, Mercedes Rincón Espinel en las calles de Arauca
Los dos servidores públicos, hacen alarde en las redes sociales sobre su creaciones culinarias y número de ciudadanos satisfechos por los manjares que sirven y en muchos casos preparados en improvisados fogones, por los distinguidos Chef y su grupo de trabajo.
Sin embargo en los últimos días, el chocolate se puso espeso y el sancocho se estaba ahumando, debido a la intensidad, calibre de las acusaciones y en algunos casos ofensas contra el equipo municipal hechas por los encargados de la producción mediática de la titular de la cartera de Gobierno Departamental, a quien no le pierden oportunidad para publicar todas sus actividades, así sean banales.
Más allá de esta magnífica labor social, se pretende esconder una rivalidad política evidente entre los dos protagonistas, la que se originó cuando se buscaba la persona que se encargaría de los destinos del Municipio, mientras se define la situación del Alcalde electo Benjamín Socadagüí.
Arauca tiene problemas muy serios que requieren de la unión y coordinación de distintos estamentos para lograr buscar mejorar la ciudad. Mal hacen quienes se escudan en la libertad de opinión para ofender y descalificar al otro, cuando hacen parte de un gobierno o son servidores públicos. Arauca necesita propuestas y soluciones inmediatas, no insultos.
Sea quien sea el mandatario local o regional merece respeto como persona y por la dignidad que ocupa, lo que no quiere decir que no se pueda cuestionar o criticar, pero nunca se podrá atentar contra la dignidad y la honra, sea cual sea la razón y menos si es con interés político como algunos reconocidos agitadores de las redes sociales lo están haciendo.