En medio de sus declaraciones en la ceremonia de ascensos de oficiales de la Fuerza Pública, el presidente Gustavo Petro analizó los avances y retos en materia de seguridad durante su mandato, y destacó la leve disminución que ha habido en los índices de homicidios, masacres y secuestros, pero advirtiendo que aún queda mucho por hacer para garantizar la paz en Colombia.
El mandatario afirmó que en 2024 se registraron 12.752 homicidios, una reducción del 1,4% respecto a los 12.958 de 2022, lo que equivale a 200 muertes menos.
Sin embargo, señaló que esta cifra, aunque representa un avance, aún es alarmante: “Todavía falta la semana más dura, porque en Colombia es tradición que la semana navideña y fin de año se convierten en los días más dolentes del año”, indicó el presidente Petro.
En cuanto a las masacres, Petro resaltó una disminución del 13% tanto en el número de eventos como en las víctimas, calificando este descenso como “importante, pero insuficiente”.
Además, mencionó caídas significativas en el secuestro y en la mayoría de los delitos contra el patrimonio, aunque alertó que la extorsión es el único delito que ha mostrado un aumento significativo.
El presidente atribuyó parte de estos resultados a las políticas de persecución contra los capos del crimen organizado, logrando la recuperación de bienes por 333 mil millones de pesos.
Sin embargo, le dijo al director de la Policía, general William Salamanca que esta cifra debe triplicarse: “Debemos llegar a un millón. Debemos arruinar a los capos a través de la inteligencia policial. Si no llegamos a esas cifras, el delito sigue pagando por vida”.
Finalmente, Petro insistió en que 2025 debe ser el año de una transformación más profunda en seguridad: “No de la caída tenue del homicidio, sino de las rupturas reales para quebrar el delito contra la vida y el patrimonio”.