La Policía Nacional publicó el cartel con los 18 rostros de las personas que habrían agredido a policías y funcionarios de la alcaldía de Bogotá durante las protestas de comunidades indígenas en la capital del país, que dejó más de 20 heridos.
En los videos difundidos en redes sociales se evidencia cómo estas personas golpean con palos y piedras a los integrantes de la Unidad Nacional de Diálogo y Mantenimiento del Orden (antes Esmad), a una joven patrullera y a dos uniformados que se desplazaban en motocicleta en el centro de Bogotá.
Pero también se evidenciaron agresiones contra los gestores de convivencia de la Alcaldía de Bogotá, quienes son los primeros en llegar a la zona de protesta para intentar, por vía pacífica a través del diálogo, levantar los bloqueos.
Asimismo, se evidenciaron ataques vandálicos contra el edificio de Avianca, ubicado sobre la carrera Séptima, y la estación de Transmilenio ‘Museo del Oro’.
Por estos hechos, la Policía Nacional ofreció una recompensa de hasta 50 millones de pesos por información que permita ubicar y capturar a las 18 personas que fueron identificadas por medio de las cámaras de seguridad instaladas en el centro de Bogotá.
¿Cómo actuó la Policía según el nuevo protocolo para atender la manifestación pública?
Según los nuevos lineamientos, los policías no deben reaccionar a las injurias y calumnias de los manifestantes, porque prima el derecho a la manifestación pública por encima del buen nombre, pero cuando se agoten las vías del diálogo y se empiezan a cometer delitos, entra la Unidad Nacional de Diálogo y Mantenimiento del Orden.
Orlando Carrillo, experto en Seguridad Ciudadana, aseguró en Caracol Radio que la Policía actuó de acuerdo a esos protocolos, respetando los derechos humanos.
“En los lineamientos se garantizó el respeto a la vida y a la integridad de los manifestantes. Se utilizaron algunos elementos como las aturdidoras para dispersar a estas personas y evitar un mayor descontrol”, aseguró.
Rechazó el comportamiento de los indígenas que participaron en los hechos violentos. “Por otro lado, la parte policiva y los gestores de convivencia respetaron en todo momento los derechos humanos, pero los manifestantes no: se salieron de casillas, lesionaron la integridad de los funcionarios de la alcaldía y la policía. Es un acto totalmente reprochable”, indicó.
El ministro de Defensa, Iván Velásquez, aseguró en su cuenta de Twitter que fueron 14 policías heridos en las protestas de los indígenas. Dijo que los responsables deben ser judicializados y sancionados.