Una verdadera emergencia invernal, viven varias localidades del departamento de Arauca, dejando alrededor de 3000 habitantes y 20 veredas circunvecinas, afectados, sin que hasta el momento sean atendidos por los organismos de socorro.
Allí en el centro poblado de Puerto Nariño, zona rural del municipio de Saravena, el río Banadía y el Caño La Madrevieja, desde tempranas horas de la madrugada desbordaron su caudal, inundando el 95% de la población, especialmente a los más de 650 estudiantes que hoy no recibirán sus clases, debido a que la institución educativa Antonio Nariño, es una de las estructuras donde los niveles de las aguas superan el metro con 20 centímetros, según confirmó Ariel Pedraza, Presidente de la Junta de Acción Comunal de la zona.
A lo largo de los años, los habitantes de este sector rural del municipio de Saravena en el Piedemonte Llanero, han clamado tanto al gobierno nacional como al departamental, incluso a la misma Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, la intervención de los puntos críticos que permitan mitigar con obras de impacto y evitar estas situaciones.
Según el dirigente comunal Ariel Pedraza, la misma comunidad reclama la construcción de un box culvert en el sector de Caño Tigre, donde se presenta represamiento por el vertimiento de las aguas del río Banadía, el que hoy nuevamente ha terminado inundando a la población, afectando enseres, cultivos y las mismas estructuras residenciales.
El Presidente de la Junta de Acción Comunal del Centro Poblado de Puerto Nariño, lanzó un nuevo llamado al gobierno nacional y departamental, indicándoles que en los sectores: Isla del Bojabá, Playas del Bojabá y Caño Negro, la comunidad ha denunciado sobre la necesidad de intervenir con urgencia de estos puntos críticos, porque se corre el riesgo de una tragedia mayor si no se atienden estos sitios donde se presenta represamiento por aguas de ríos y caños.
El señor Ariel Pedraza reveló además la asignación de 400 millones de pesos para la construcción del box culvert que requiere la comunidad, para evitar estas inundaciones, pero que los requerimientos normativos de la Corporación Autónoma Regional de la Orinoquia – Corporinoquia, no permitieron que la obra se ejecutara en época de verano, señalando el dirigente social, que la entidad se ha convertido en un obstáculo para la realización obras de mitigación en puntos críticos de los cauces de algunos ríos, las cuales evitarían tragedias de este tipo y donde ya se tienen priorizados los recursos desde el orden nacional y departamental.
La comunidad también ha reportado inundaciones en la parte rural del municipio de Tame, por el desbordamiento de los ríos Cabalalía y Caranal, dejando estragos y pérdidas en parcelas y cultivos de pan coger.