Dos nuevos atentados contra la infraestructura petrolera se consumaron el jueves y la madrugada de este viernes. Las explosiones se produjeron en zonas rurales de Boyacá y Arauca respectivamente.
El primer atentado ocurrió pasadas las 2.25 de la tarde del primero de mayo en la vereda Agualinda, kilómetro 102 del oleoducto, límites entre los departamentos de Boyacá y Norte de Santander.
Aunque Ecopetrol ya activó un plan de contingencia, las autoridades han alertado sobre una posible emergencia ambiental a causa del derrame de crudo debido a que podría contaminar varios afluentes cercanos, en especial el río Arauca.
El segundo atentado se ejecutó en el kilómetro 42 + 500 metros, vereda Brasilia en el municipio de Arauquita, departamento de Arauca. Allí, según testimonio de campesinos, cayó crudo a un pequeño caño cerca de un cultivo de arroz. Al sitio aún no se implementa el plan de contingencia de Ecopetrol.
En las zonas donde ocurrieron los atentados al oleoducto Caño Limón Coveñas operan insurgentes del Eln.
Vale la pena recordar que, en lo corrido del presente año son más de 23 ataques dinamiteros los que ha sufrido el oleoducto de 770 kilómetros y hace 38 días, está suspendido el bombeo de petróleo desde los campos de caño limón y Caricare en el departamento de Arauca.

