Desde Valledupar, en el marco de un evento de entrega masiva de tierras, el presidente Gustavo Petro rechazó el atentado que se produjo en la ciudad de Cali y el ataque a un helicóptero de la Policía en Amalfi, Antioquia. Estos actos dejan un saldo de al menos 17 muertos.
“Hoy ha sido un día de muerte en muchas regiones del país. Con los datos últimos recogidos tenemos ocho miembros de la Policía Nacional muertos, y ocho heridos, en una región de Amalfi, Antioquia, cuando su misión era erradicación de cultivos de hoja de coca (…) La cifra de muertos en Cali ascienda ya a 5, 14 heridos. Voy a pedir inicialmente un minuto de silencio por ellos”, comenzó señalando el mandatario.
Petro aseguró que estos ataques son una “reacción a los hechos de ayer, la derrota militar de la columna Carlos Patiño, con la pérdida de buena parte del Cañón del Micay”.
Ante esta situación de violencia en dos puntos del país, el mandatario solicitó “al Estado colombiano y en general al mundo, a los Estados nacionales, que la Junta del Narcotráfico y sus bandas, disidencias de Iván Mordisco, Segunda Marquetalia y Clan del Golfo, sean consideradas organizaciones terroristas, perseguibles en cualquier lugar del planeta Tierra, incluida Bogotá”.
El presidente anunció también que le pedirá a la Agencia de Defensa Jurídica del Estado que “paralelamente inicie, de acuerdo al Estatuto de Roma, un proceso contra los dirigentes armados de estas bandas y los integrantes de la Junta del Narcotráfico a escala mundial: un proceso por delitos contra la humanidad cometidos en Colombia sistemáticamente, que se pueden calificar”.
En el mismo sentido, el jefe de Estado solicitará a la Corte Penal Internacional que adelante “una investigación por los hechos cometidos antes de este gobierno y durante que demuestran que son criminales de guerra, que acuden al terror, son criminales contra la humanidad”.