Los soldados profesionales, Andrés Felipe Pérez y Blaider Antonio Rodríguez, secuestrados por la guerrilla del Eln desde hace diez días en una emboscada en la población de Güicán, Boyacá podrían ser liberados en las próximas horas o días por esa célula subversiva en territorio del departamento de Arauca.
Ante este anuncio, las fuerzas militares y de policía mantienen su ofensiva para hacerle frente a esta estructura guerrillera que tiene un amplio movimiento de su personal en casos urbanos y área rural de los municipios del Piedemonte Llanero, como Tame, Saravena, Arauquita, Arauca y Fortul, este último donde se han registrado las liberaciones de este grupo al margen de la ley.
“El Frente Domingo Laín Sáenz del ELN tiene comisiones en los siete municipios del departamento de Arauca y el Batallón Héroes y Mártires, responsable del asesinato de los once militares y un policía son de amplia injerencia en los municipios de Fortul, Arauquita y Saravena”, reveló el comandante del departamento de policía, coronel Camilo Ernesto Álvarez Ochoa.
La guerrilla del ELN y sus cabecillas también tiene un amplio dominio en la línea fronteriza con el estado Apure, en Venezuela que limitan con los municipios de Arauca capital del departamento, Arauquita, Saravena y parte de Cubará en Boyacá, otro sitio que podría estar limitado para la entrega de estos dos militares que son esperados por sus familiares.
“Todo acto humanitario es bienvenido para un proceso de paz y para el progreso y desarrollo de cualquier pueblo o nación, todo el pueblo colombiano hemos puesto la esperanza en que el proceso de paz y los que faltan lleguen a unos acuerdos de manera civilizada y digna ”, aseguró el padre José María Bolívar Monroy, Vicario General de la Diócesis de Arauca al conocer la noticia de esta posible liberación de los soldados profesionales Andrés Felipe Pérez y Blaider Antonio Rodríguez, quienes están adscritos al Batallón de Alta Montaña Santos Gutiérrez Prieto de la Primera Brigada del Ejército con sede en Boyacá.
Frente a esta posibilidad de regreso pronto a casa de los dos uniformados, el religioso, expresó: “todo ser humano dentro de las facultades, los valores y derechos que tiene es la libertad y la libre movilización, por lo que todo secuestro, toda retención, privación de la libertad es un atropello contra la dignidad humana, la liberación de estos dos militares tiene que darse lo más pronto posible, por lo que la iglesia aplaude, acompaña y felicita actitudes como esta y ojala que jamás se vuelvan a repetir”