Por medio de una circular, los ministerios del Interior y de Minas presentaron los primeros lineamientos para el desarrollo de proyectos de fracking en Colombia. El documento asegura que estas prácticas deben contar con la participación de los grupos de interés y la población, por lo que uno de los requisitos para los contratistas será establecer mesas técnicas y de diálogo con la comunidad. Además, establece que los contratistas deben identificar los potenciales riesgos que esta práctica genera en materia social, para analizar la futura conflictividad de la zona.
“El contratista adelantará un ejercicio de planeación participativa con los grupos de interés del área de influencia, contando con la participación de las Mesas Territoriales de Diálogo y Seguimiento, y el acompañamiento de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, que permita definir los programas en beneficio de las comunidades y la destinación de la suma correspondiente a la participación económica de los mismos”, establece la circular.
El documento también señala que el contratista debe analizar las principales características socioeconómicas y culturales de cada región para abordar componentes mínimos, como los indicadores poblacionales, género y etnia, acceso a servicios públicos domiciliarios e infraestructura.
También se debe identificar el estado de las vías, el acceso a programas sociales con énfasis en la atención vulnerable, víctimas del conflicto armado y sujetos de especial protección constitucional.
