El encuentro con el presidente Gustavo Petro además de ser cordial, respetuoso y reflexivo sobre una coyuntura nada fácil que es la que está viviendo el sector rural, permitió establecer que comprará 3 millones de hectáreas, pero no de cualquier tierra, pues estas tienen que ser productivas y tener futuro en este sentido.
Así lo manifestó José Félix Lafaurie Rivera, presidente ejecutivo de FEDEGÁN quien, a su vez, afirmó que “en consecuencia, el gremio va a identificar aquellos escenarios en los que eventualmente puede facilitarle al gobierno esta tarea”.
Se hizo un buen análisis y en consecuencia se hace inminente enviar un mensaje claro, en dos sentidos: primero el gobierno va a cumplir el acuerdo que se firmó con las Farc, en materia de tierras y, el segundo, FEDEGÁN, en ese sentido no va a ser un obstáculo si el gobierno -como lo ha dicho de manera reiterada el presidente- va a comprar tierras”.Precisó que el objetivo del gremio es contribuir para que el citado tema le salga bien al país rural que merece unos mejores mensajes de los que se han dado hasta la fecha por parte de ciertos sectores que creen que pueden -esos si- hacer justicia por su propia mano.
Venta de tierras
En cuanto al tema de la venta de tierras sostuvo que “Colombia según las estadísticas oficiales tiene cerca de 55 millones de hectáreas de propiedad privada y, de estas, el sector ganadero puede estar teniendo propiedad privada en torno a los 34 millones de hectáreas”.
Enfatizó que el sector ganadero indudablemente tiene más del 60 por ciento del total de la tierra de la frontera agrícola colombiana de propiedad privada, es decir, aquella que le pertenece a particulares.
Si el Estado está dispuesto a comprar 3 millones de hectáreas, como lo ha dicho el presidente, muy seguramente habrá muchísimos ganaderos que eventualmente se acojan a las ofertas del gobierno.
“El Gobierno está dispuesto a comprar tierras y lo que habría que buscar es un acuerdo en torno a la manera de avanzar en ese frente”, anunció.
Economía de mercado
Para Lafaurie Rivera, la venta estaría sujeta a la economía de mercado. “Precisamente es el mercado el que va a decir si los precios que el gobierno plantea y está dispuesto a comprar, son con los que el vendedor estaría dispuesto a vender”.
Comprar es diferente a expropiar. Aquí comprar seguramente se hará mediante una oferta pública -supongo-. En ese sentido, el gobierno irá precisando los detalles y la manera de hacerlo.
Que el campesino tenga un mejor vivir
“Ahora bien, el gobierno no va a comprar tierras según entiendo, de manera indiscriminada y en cualquier parte. El gobierno lo ha dicho, quiere comprar tierras que realmente permitan tener un buen futuro, incluso, en las conversaciones de ayer, el presidente en algún momento fue un tanto crítico de ciertas compras de tierras inadecuadas que hizo el Incora en su momento”, recalcó.
Aquí se trata de no perpetuar la pobreza del sector campesino sino de ver como se logra con estas nuevas dinámicas que quiere implementar el gobierno, que el campesino tenga un mejor vivir. Es un poco hacia donde el país tendría que mirar, qué hacer.
Repetir los errores que se cometieron en las reformas agrarias que se implementaron a partir de la Ley 135 en adelante, me parece un error. Aquí es necesario mirar más allá de simplemente la compra de tierras. Tal y como lo tiene el acuerdo con las Farc, ahí repite como eslogan ‘reforma rural integral’ y, ese ‘integral’, va mucho más allá de repartir tierras.
Las conversaciones con el presidente Petro giraron en esa dirección, cómo mejorar -si se hace- para que realmente el campesino puede tener unos escenarios de redención desde el punto de vista económico y de integración con la sociedad.