Decir la verdad en Arauca, podría llevarnos a silenciarnos como medio y como personas. Si… así, como lo escuchan.
Desde hace 50 años, La Voz del Cinaruco ha servido a los araucanos. Nuestras informaciones son de fuentes creíbles o documentales. En nuestros espacios tienen, y han tenido cabida distintos sectores y organizaciones sociales, por eso no es raro que en una misma emisión, se escuchen voces y pensamientos diversos, manteniendo una pluralidad en la información y respetuosos de la libertad de pensamiento e ideología.
La desafortunada mención, de La Voz del Cinaruco, por el más reciente comunicado del Frente Oriental de Guerra del ELN, se suma a la arremetida por parte de corruptos para aniquilar esta casa radial, patrimonio de los araucanos.
Luchamos día a día por mantener informados a nuestros oyentes, también para salvaguardar los recursos públicos de los buitres que mercantilizaron la salud, que se robaron el dinero de las vías, que no les importa intoxicar menores con tal de llenar sus bolsillos, incluso se atreven hasta intentar asfixiarnos económicamente… todo esto por decir la verdad.
Nuestra misión es simple: servir e informar. Así lo haremos hasta que nuestros oyentes nos lo permitan, son ellos a quienes nos debemos y se merecen nuestro respeto. Intentar silenciar un medio de comunicación es herir de muerte la libertad de expresión e información, es quitarle la Voz a un pueblo oprimido por la violencia y marcado por la falta de oportunidades.
Para lograr la paz que tanto anhelamos, lo primero que debemos hacer es buscar la verdad, escuchar al otro y respetar su opinión. Desde La Voz del Cinaruco, informaremos los pormenores de los diálogos entre el gobierno y la guerrilla del ELN, pero rechazamos enfáticamente el señalamiento hecho en este comunicado.
Buscar información con apego a la verdad y transmitirla, contribuye a la liberación de los pueblos. La Voz del Cinaruco seguirá informando de manera independiente y libre, pero con absoluta responsabilidad con la audiencia y por nuestros invitados, hasta que Dios y los oyentes nos lo permitan.
La Voz el Cinaruco… Patrimonio del pueblo araucano