Han sido los mismos habitantes del Corregimiento de El Caracol, quienes expresaron su preocupación al periodismo de Noticias Caracol de La Voz del Cinaruco, frente a una posible arremetida que se podría dar contra los miembros de la fuerza pública.
La comunidad en los últimos cuatro días ha sentido temor y zozobra, pero también intranquilidad. Dicen que han perdido el sueño, porque a altas horas de la noche se han escuchado disparos, sin conocerse si son actuaciones de la fuerza pública, a modo de disuasión para contrarrestar cualquier acción de los actores armados, o por el contrario, sean los mismos guerrilleros que pretenden adelantar una acción bélica contra las instalaciones de la Estación de Policía que se encuentra en la población.
Los habitantes y la dirigencia comunal manifestaron a este medio radial, que en el transcurso de esta semana demandarán de las autoridades una explicación de lo que viene ocurriendo en la población, ante esa sensación de intranquilidad que ronda en los habitantes, quienes podrían verse expuestos a un posible ataque donde quedaría en medio del fuego cruzado, la población civil.
La comunidad está pidiendo a la Defensoría del Pueblo, a los miembros de la OEA y Acnur, realizar un monitoreo y elevar una alerta temprana frente a esta intranquilidad que presentan los habitantes, antes de que ocurra una tragedia que se tenga que lamentar a futuro, en una región donde han intervenido todos los actores generadores de violencia y que a la fecha, se ha convertido en un corredor ilegal para el tráfico de toda una serie de mercancías de contrabando e hidrocarburos, negocio del que tienen dominio elementos al margen de la ley que se relacionan al grupo subversivo del ELN.
Los residentes caracoleños pidieron a las autoridades policiales, acantonadas en la población, así como a las tropas del Ejército que hacen parte del Batallón José María Mantilla, acciones efectivas y mayor operatividad para contrarrestar el accionar violento que se viene presentando en la zona, donde la percepción que se tiene, es de inseguridad.
Los hechos ocurridos en las veredas Feliciano y Cabuyare, donde en menos de 24 horas fueron asesinadas tres personas y hurtado un vehículo, fue una situación que estaba anunciada, pues en la zona, andan como ‘Pedro por su casa’ hombres vestidos de civil y armados, los que se identifican como miembros de la guerrilla del ELN, quienes vienen actuando y exigiendo a los finqueros el pago de vacunas, bien sea con dinero o bienes en especie.