El presidente Iván Duque llegó este martes 17 de noviembre a la isla de San Andrés, golpeada por el paso del huracán Iota, de categoría 5, y dijo que desde el aire pudo constatar la magnitud de la destrucción en Providencia.»Estuvimos haciendo un sobrevuelo a la isla de Providencia antes de nuestro aterrizaje aquí en la isla de San Andrés», dijo Duque en la pista del aeropuerto Gustavo Rojas Pinilla, que reabrió después de permanecer dos días cerrado debido a las torrenciales lluvias y vientos de hasta 250 kilómetros por hora causados por Iota.
El presidente dijo que de inmediato abordará en San Andrés, la mayor isla del archipiélago, «un avión que tiene la capacidad de llegar a Providencia dada la situación de vientos, y atender a la comunidad». Sin embargo, dijo que en el vuelo entre Cartagena de Indias y San Andrés pudo ver el estado en que se encuentra Providencia, isla de unos 5.000 habitantes situada unos 90 kilómetros al noreste.
El mandatario recordó que pudo hablar por teléfono con el alcalde de Providencia, Jorge Norberto Gari Hooker, quien le informó de la destrucción sufrida, «que la pudimos observar también en el sobrevuelo y es prácticamente una destrucción del 98, el 99 % de infraestructura».
«El balance preliminar es que hay una persona fallecida y una persona desaparecida, esperamos llegar al territorio para tener un levantamiento de información con mayor precisión», agregó.
El presidente dijo que embarcaciones de la Armada Nacional que partieron de la base naval de San Andrés ya están fondeadas cerca de Providencia esperando que mejoren las condiciones del mar para desembarcar ayuda humanitaria.
«Estaremos desplegando toda la capacidad del Gobierno para llegar a atender, evacuar algunos de los heridos y tener una capacidad de respuesta de manera inmediata», afirmó.
Anoche (lunes 17 de noviembre) también zarpó de Cartagena de Indias la fragata ARC Independiente, que lleva 15 toneladas de ayuda humanitaria y más de 190 efectivos de la Armada, del Ejército, personal de la Unidad de Gestión de Riesgo, de la Cruz Roja y expertos en atención de emergencias para socorrer a los habitantes de Providencia y de la vecina isla de Santa Catalina, que fueron impactadas de lleno por el huracán.
Iota también causó grandes daños materiales en San Andrés, como averías en viviendas, postes y árboles derribados, pero por estar ubicada más al sur de la ruta del huracán el impacto fue menor que en Providencia.
Tras azotar el archipiélago colombiano, el huracán siguió por el Caribe y entró a Nicaragua, donde perdió fuerza y fue degradado a tormenta tropical con nivel 2 en la escala Saffir-Simpson, aunque también causó estragos en parte de Centroamérica.
