El embajador de Colombia en Estados Unidos, Daniel García-Peña, estará la semana del 8 de septiembre, con el comandante de las Fuerzas Militares, almirante Francisco Cubides, y el director de la Policía, general Carlos Fernando Triana, en Estados Unidos en una agenda con miembros de ese país.
El objetivo de este viaje, que aún está en revisión por parte del Ministerio de Defensa, sería hablar de los avances de Colombia en la lucha contra el narcotráfico.
No obstante, también coincide con la decisión que debe tomar el gobierno de Estados Unidos en los próximos días, que mostraría una eventual “descertificación”, una medida que pondría en riesgo los recursos de cooperación internacional, sobre todo para la lucha antidrogas, por lo cual sería también una forma de evitar dicha noticia.
Ahora, este viaje se da en medio de tensiones regionales entre Venezuela y Estados Unidos, ya que el gobierno del presidente Gustavo Petro, ha mostrado de alguna forma apoyo a Nicolás Maduro.
De forma paralela, otra misión militar se desarrolla en territorio estadounidense. El general Luis Emilio Cardozo, comandante del Ejército, adelanta desde la semana pasada una agenda en Texas con el Ejército Sur de EE. UU.
Su gestión busca garantizar apoyo y recursos para superar el déficit en el mantenimiento de aeronaves, en especial los helicópteros MI-17, considerados esenciales para las operaciones militares en Colombia, pues en enero se suscribió un contrato con una empresa americana para su mantenimiento, y esta compañía, incumplió.
¿Qué significa la descertificación a Colombia?
La “descertificación” es un mecanismo mediante el cual el gobierno de Estados Unidos evalúa anualmente los esfuerzos de los países en la lucha contra las drogas.
Si considera que una nación no ha mostrado resultados suficientes, puede retirarle su respaldo político y suspender ayudas económicas y de cooperación en seguridad.
Aunque no implica una ruptura de relaciones, sí representa un fuerte golpe diplomático y financiero.