Desde el foro World in Progress, que organizó el Grupo Prisa en la ciudad de Barcelona, el expresidente Juan Manuel Santos puso en tela de juicio el rol de mediador que ha venido adelantando Colombia, junto a Brasil y México (que terminó apartándose), ante la crisis política que atraviesa Venezuela por los cuestionamientos a los resultados electorales que mantuvieron a Nicolás Maduro como presidente.
De entrada, de hecho, el expresidente Santos en su intervención se refirió al opositor venezolano Edmundo González como el ‘presidente electo’. También dijo que se le debe acompañar en esta lucha contra el régimen de Nicolás Maduro, con “solidaridad que necesita del mundo entero”.
Fue en ese punto que lanzó críticas al rol del Gobierno: “Colombia puede ser muchísimo más de lo que está siendo, porque no está haciendo nada frente a Venezuela. La posición de Colombia ha sido ambivalente, desafortunadamente; ha dicho que se está prestando para poder mediar, pero hay un momento donde la mediación se vuelve es complicidad, y ese límite yo creo que ya lo pasamos”.
El exjefe de Estado aseguro que “Colombia debería, por los interéses también colombianos, ser mucho más determinante y fuerte en su posición frente a Venezuela, porque nosotros estamos sufriendo también las consecuencias (…) no podemos seguir con posiciones ambiguas, tratando de ver si hay posibilidad porque eso lo que ha permitido, infortunadamente, es que el rémigen se atornille”.
El nobel de Paz también mostró sus reparos a la manera en la que Estados Unidos ha actuado: “A mí me sorprende, por ejemplo, cómo un país que ha defendido tradicionalmente las democracias, sobre todo en la región, como Estados Unidos, ha mantenido una política frente a Venezuela muy blanda; prácticamente no existe en la política exterior norteamericana y esa señal ha sido muy contraproducente”.