La Oficina del Alto Comisionado para la Paz, aseguró que los reclamos de la comunidad en el municipio de Tibú, en Norte de Santander, expresando sus diferencias con el Gobierno del presidente Gustavo Petro son válidas porque es la población civil la afectada directa en este caso por el Estado Mayor Central de las Farc.
El Comisionado para la Paz, Danilo Rueda, asegura que no hubo ni insultos, ni amenazas de muerte, ni ninguna acción que pusiera en riesgo su vida.
Aseguran que la decisión del Gobierno Nacional de suspender las operaciones ofensivas contra el Estado Mayor Central de las Farc no fue algo improvisado.
“Reiteramos que la decisión ya había sido tomada y fue el resultado de una semana de trabajo y lo que se hizo en el acto público de instalación de la mesa fue informar el acuerdo”.
La Oficina del Alto Comisionado para la Paz destaca el trabajo de las delegaciones de paz del Gobierno colombiano y el Estado Mayor Central de las Farc y que lo de ayer en el Polideportivo de Tibú, Norte de Santander, es el inicio de unos diálogos cuyo foco serán los territorios y la población civil.