Sin piso quedaron las imputaciones hechas contra la dama de la sociedad araucana, Lilián Castellanos Poveda por parte de la Fiscalía sugeridas por supuestos delitos federales, según la embajada norteamericana con sede en la capital del país.
La captura de Lilián se hizo efectiva el pasado 18 de marzo en la urbanización Santa Bárbara en medio de un espectáculo de película del CTI, como si se trata de una persona altamente peligrosa y creando terror en el vecindario por el exceso de fuerza exhibido.
Tal como la comunidad lo creía ni los norteamericanos ni la propia Fiscalía encontraron argumentos que sustentaran la captura y extradición, diligencia que terminó en un lacónico mensaje de la embajada señalando que "la embajada tiene el honor de retirar la solicitud de detención provisional anteriormente mencionada para propósitos de extradición. De xonformidad, la Embajada se permite solicitar que la Fiscalía General de la Nación desista y retire la orden de captura provisional decretada contra María Lilian Castellanos Poveda el 18 de marzo de 2009"
En tal circunstancia la Fiscalía muy obediente al mandato norteamericano comisionó al Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario para que notificara personalmente a la dama afectada del contenido de la providencia de retiro de los supuestos cargos y ordenar su libertad inmediata.
Expertos en temas penales señalaron que este tipo de atropellos del gobierno norteamericano no debe permitirse, porque se jugó con la dignidad de una persona a quien no le hallaron méritos de responsabilidad en los cargos imputados y la Fiscalía tampoco se preocupó en investigar si las acusaciones tenían fundamento.
Defensores de derechos humanos no vacilaron en afirmar que Castellanos Poveda fue víctima de otro falso positivo
