Con rostros alegres, ropa deportiva, lonchera y uno que otro con gafas oscuras invocando la juventud que los abandonó hace unos años, pero que los hizo vivir momentos muy felices, estuv ieron el viernes pasado en la Piscina con Olas unos 550 viejos para celebrar el Día del Adulto Mayor.
Los ancianos que hacen parte de los programas que promueve el Centro integral de Capacitación y Atención a la Familia (Cicaf), hicieron sus propias presentaciones artísticas, escucharon a las funcionarios de la Administración Municipal y lucieron su cuerpo con rastros de una figura escultural.
Al medio día tomaron alimentos gracias a los Almuerzos Calientes, del programa nacional Juan Luis Londoño de la Cuesta y recibieron homenaje musical con mariachis que les llevó la Caja de Compensación Campesina (Comcaja), entidad que trabaja de la mano en las actividades sociales con la Alcaldía.
Cada longevo recibió un abrazo y un detalle de la gestora social del municipio Constanza Mantilla de Posso y de la coordinadora del Cicaf, Luz Alba Porras, que en compañía de los profesionales de la entidad trabajan diariamente para mejorar la calidad de vida de los viejitos.
La celebración culminó con la oración al Adulto Mayor y con una sonrisa de hermandad que les permitió pescar en la piscina, jugar tejo, rana y bailar con los recreacionistas de la Unidad de Deportes. Los abuelitos agradecieron a la Administración Municipal y al alcalde Hernando Posso Parales, por apoyar proyectos encaminados a la tercera edad y le pidieron a los aspirantes a la Alcaldía darle continuidad a esta noble labor.
