Con el sólo anuncio de los avances de la reforma tributaria en el Congreso de la República, se prendieron todas las alarmas en la industria petrolera en Colombia. En Arauca, más de 2.050 empleos están en riesgo, debido a que este sería un golpe fuerte a las finanzas de las empresas de este sector, que se verían desincentivadas ante las absurdas cargas tributarias que impondría el gobierno nacional.
Las cuentas no pueden ser más claras, cerca del 35% de impuestos que se están pagando, entrarían a tributar por el 80%. Con esa carga ni el más exitoso negocio se podría sostener a futuro y más si para obtener utilidades se deben invertir y poner en riesgo miles de millones de dólares. Esto sin contar con las difíciles circunstancias de orden público que se registran en la zona y el complejo relacionamiento con la comunidad de las zonas de influencia directa.
Sólo para mencionar dos ejemplos de lo que podría pasar y que anunciaron las empresas prestadoras de servicios o subcontratistas, donde una de ellas advirtió que de 800 empleos que se generan podrían quedar únicamente con 100.
Ni que decir, de los transportadores, quienes también se verían afectados, de aprobarse la tributaria como está planteada. El representante legal de una de estas empresas, aseguró, que en la actualidad tienen 130 empleados, todos de origen araucano y que las compras de combustible mensual en la ciudad suman 860 millones de pesos aproximadamente.
Aplicado el “freno de emergencia” a la inversión por las multinacionales y grandes empresas del sector petrolero, se vería afectada la ya deteriorada economía de la región. Los proyectos y programas sociales se limitarían enormemente a tal punto de quedar casi en cero, según lo manifestado por voceros de dichas empresas.
Arauca sin regalías sencillamente se convertiría en un departamento inviable desde todo punto de vista, ya que no existe otro dinamizador económico más fuerte o por lo menos que se compare con el circulante que se mueve por la cadena económica generada a partir de la exploración y explotación petrolera. Sin duda para Arauca vendrán días difíciles.