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Salario mínimo 2026: ¿Qué implicaciones tiene el aumento del 23%? Análisis de expertos

Gustavo Petro hizo oficial el decreto del Salario Mínimo para 2026 tras el desacuerdo en la mesa de concertación, los rumores sobre un incremento atípico e inusual se hicieron realidad y, finalmente, se rompió la barrera que oscila entre el 12% y 16%, fijándose en un 23%, lo encendió las alarmas y las expectativas, tanto de parte de las centrales obreras, como de los empresarios.

El Gobierno Nacional, impulsando el concepto de “Salario Mínimo Vital” y la recuperación del poder adquisitivo perdido en décadas anteriores, apostó por un aumento agresivo, que beneficiaría a los trabajadores, pues según un documento filtrado, el mínimo llegó a un incremento del 23%; sin embargo, esta cifra tendría algunos riesgos en el apartado económico.

De esta manera, le contamos las implicaciones de un aumento de tal magnitud, teniendo en cuenta que el mínimo pasó de 1′423.500 pesos colombianos a dos millones con el auxilio de transporte.

Ámbito positivo: Reactivación y Justicia Social

Para los defensores de un aumento robusto, un alza del 20% o más no es solo un número, es una corrección histórica.

  • Impacto inmediato en el consumo interno: La teoría sugiere que, al poner más dinero en el bolsillo de la clase trabajadora (que tiene una alta propensión al consumo), se dispara la demanda de bienes y servicios básicos. Esto podría dinamizar el comercio al por menor en el primer trimestre de 2026.
  • Reducción de la brecha de desigualdad: Colombia sigue siendo uno de los países más desiguales de la OCDE. Un aumento sustancial busca acercar el ingreso mínimo al costo real de la canasta familiar, cumpliendo con el mandato constitucional de una remuneración “móvil y vital”.
  • Mensaje político: Sería una victoria tangible para el Gobierno Petro, consolidando su base popular al demostrar que se privilegió el bienestar del trabajador sobre la ortodoxia técnica empresarial.
  • Vea también: Así quedaría la jornada laboral en Colombia 2026 : Cuántas horas se reducen tras ajuste de año nuevo

Los Riesgos: El “Efecto Boomerang” Económico

Los analistas y el gremio empresarial advierten que un aumento desconectado de la productividad (que fue baja este año) y de la inflación proyectada podría ser contraproducente:

1. La espiral inflacionaria (Wage-Price Spiral): El riesgo más inmediato es que el remedio agrave la enfermedad. Si las empresas deben pagar nóminas un 20% más costosas, inevitablemente trasladarán ese costo al precio final de sus productos.

Esto crea un círculo vicioso en el que el salario sube, los precios suben para compensar, y en cuestión de meses, el aumento nominal del 20% desaparecerá en términos reales, dejando al trabajador con la misma capacidad de compra pero en una economía más cara.

2. Golpe a la formalidad y las Mipymes: Las grandes corporaciones podrían absorber el golpe reduciendo márgenes, pero el tejido empresarial de Colombia es 90% Mipymes:

Despidos: Una panadería de barrio o una pequeña manufactura que opera con márgenes estrechos podría verse forzada a reducir personal para cuadrar caja.

Informalidad: Ante la imposibilidad de pagar un salario oficial tan alto, muchos empleadores podrían ofrecer trabajos “por fuera de nómina”, disparando la informalidad laboral que hoy ronda el 56%.

3. Freno a la bajada de Tasas de Interés: El Banco de la República ha trabajado duro para bajar la inflación y, consecuentemente, las tasas de interés para reactivar la vivienda y el crédito. Un aumento salarial desmedido podría ser interpretado por el Emisor como una presión inflacionaria, obligándolos a subir o mantener altas las tasas de interés en 2026, encareciendo los créditos de consumo y vivienda.

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