La Asociación Bancaria, Asobancaria, manifestó su desacuerdo y preocupación frente al decreto de emergencia económica expedido por el Gobierno nacional, al considerar que la medida carece de fundamentos jurídicos y técnicos que la justifiquen.
De acuerdo con el gremio, no existe un hecho extraordinario que amerite la declaratoria de un estado de excepción. Además, advierte que el decreto revive “por la puerta de atrás” una reforma tributaria que ya fue derrotada democráticamente en el Congreso de la República.
Impacto en el sector financiero
Uno de los principales reparos del sector bancario está relacionado con la sobre-sobretasa al sistema financiero, que elevaría el impuesto de renta hasta el 50%. Según la Asociación Bancaria, esta carga tributaria implicaría que la mitad de la actividad bancaria del país quede en manos del Estado.
El gremio alerta que esta medida ubicaría a Colombia, junto con Islas Comoras, como uno de los países con menor competitividad tributaria del mundo para el negocio financiero, afectando gravemente el atractivo del país para la inversión.
Consecuencias para familias, empresas y estudiantes
La banca también advirtió sobre las implicaciones directas para la economía real. Entre ellas, el desestímulo al crédito de vivienda, las dificultades para los empresarios que buscan ampliar su producción y los obstáculos para los estudiantes que necesitan financiar su educación.
En términos generales, el presidente de Asobancaria, Jonathan Malagónm asegura que el decreto podría generar una restricción del crédito en Colombia, afectando el acceso a financiación y frenando el dinamismo económico.
Riesgos para el crecimiento económico
Finalmente, la Asociación Bancaria subrayó que el país necesita más inversión y mayor crecimiento, por lo que advirtió que medidas de este tipo desplazan al sector privado en favor del sector público, lo que compromete el crecimiento de largo plazo de la economía colombiana.
El gremio hizo un llamado al Gobierno para reconsiderar la medida y propiciar un debate técnico e institucional que brinde estabilidad, confianza y reglas claras para el desarrollo económico del país.

