La Fiscalía General de la Nación firmó un principio de oportunidad con María Alejandra Benavides, exasesora del ministerio de Hacienda implicada en el entramado de la Unidad de Gestión del Riesgo -UNGRD-, el caso de corrupción más grande descubierto en el Gobierno de Gustavo Petro..
Con la negociación judicial Benavides, obtendría “inmunidad” frente al delito de interés indebido en la celebración de contratos, a cambio de convertirse en testigo del exministro Ricardo Bonilla y otros funcionarios que habrían participado en el entramado de corrupción que se apropio de los recursos del Estado.
La audiencia para legalizar el principio se realizará el próximo 22 de julio ante un juez de control de garantías. De ser avalado, el ente acusador seguiría con la imputación de cargos contra el exjefe de la cartera económica por los delitos de tráfico de influencias e interés indebido en la celebración de contratos.
Hay que recordar que, Benavides está involucrada en un capítulo del entramado que también relaciona a Bonilla: el direccionamiento irregular de tres contratos por $92.000 millones en los municipios de Cotorra, Córdoba; Saravena, Arauca, y en Carmen de Bolívar, recurso con los que se habría ordenado“comprar”a varios congresistas de la comisión de crédito público, con el objetivo de que votaran a favor de la aprobación de unos créditos que necesitaba el Gobierno Nacional.
La orden de “contratos de la UNGRD por votos” la habrían dado el exministro de Hacienda, Ricardo Bonilla
“El ministro Bonilla González le dio a usted la instrucción de recibir proyectos de inversión regional en los que estaban interesados los parlamentarios que integran la mencionada comisión. Recibida la instrucción del entonces ministro, éste le manifestó a usted que los proyectos contractuales que recibirían debían ser tramitados a través de la Unidad Nacional para la UNGRD»: así lo dijo la fiscal María Cristina Patiño ante el juzgado 56 de garantías de Bogotá, durante la imputación de Benavides.