El Ministerio de Defensa de Rusia informó hoy de que se ha producido el canje de otros 303 prisioneros de guerra por bando, con lo que se ha completado el intercambio de mil prisioneros acordado con Ucrania en Estambul durante las primeras negociaciones directas con Kiev en tres años.
“El 25 de mayo, 303 soldados rusos fueron devueltos del territorio controlado por el régimen de Kiev. A cambio, se entregaron 303 prisioneros de las Fuerzas Armadas de Ucrania”, señaló Defensa en un comunicado publicado en su canal de Telegram.
Actualmente, los militares rusos se encuentran en el territorio de Bielorrusia, donde reciben la asistencia psicológica y médica necesaria, añade la nota.
Todos los militares liberados serán trasladados a la Federación de Rusia para recibir tratamiento médico y de rehabilitación en hospitales del Ministerio de Defensa.
“Así, de conformidad con los acuerdos ruso-ucranianos alcanzados el 16 de mayo en Estambul, entre el 23 al 25 de mayo, las partes rusa y ucraniana realizaron un intercambio según la fórmula de mil por mil personas”, concluye el comunicado castrense.
El canje se llevó a cabo en el curso de tres días: el viernes cada una de las partes liberó a 390 prisioneros; el sábado, a 307, y hoy, por último, a los restantes 303.
¿Qué viene ahora?
Luego de la primera ronda de contactos entre Rusia y Ucrania en Turquía, ambos lados acordaron que el segundo punto (luego de la primera fase de liberación de mil prisioneros de guerra) se centra estudiar un plan de cese al fuego.
Las delegaciones de Rusia y Ucrania definieron que cada uno creará un plan de alto al fuego que presentará al otro bando para que lo estudie y, una vez revisado, se deberá concertar y aplicar un alto al fuego que sea acorde a los planteamientos de ambas partes.
El problema del segundo punto de la negociación es que no se han definido fechas. Aunque hay claridad de lo que debe ocurrir, se desconoce cuándo pasará. La cancillería rusa aseguró que una vez recibieran los mil prisioneros de guerra entregarían su plan de tregua.
Siguen los ataques
Ucrania vivió en la noche del sábado a este domingo lo que las autoridades consideran el peor ataque ruso en semanas con bombardeos que dejaron al menos 12 muertos y 60 heridos, tras lanzar Rusia cientos de drones y decenas de misiles en la última jornada del proceso de canje de 1.000 prisioneros de cada bando acordado en Estambul.
El ataque aéreo obligó a trabajar toda la noche a los Servicios de Emergencia y a una Fuerza Aérea de Ucrania que logró neutralizar 266 drones y 45 misiles, aunque sus operativos no evitaron que sistemas de ataque aéreo rusos impactaran en localizaciones diseminadas por todo el país, dejando 12 muertos y 60 heridos, según las primeras informaciones del Ministerio del Interior.
“El enemigo utilizó misiles y drones de ataque. Las viviendas de los civiles fueron blanco de los ataques: más de 80 edificios residenciales resultaron dañados. Se registraron 27 incendios, y los bomberos siguen extinguiendo las llamas en 3 lugares”, escribió Igor Klimenko en su cuenta de la red social Facebook a modo de balance provisional.
El ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Andrí Sibiga, calificó en su cuenta de la red social X los bombardeos como “el mayor ataque aéreo ruso de las últimas semanas”.
Zelenski pide sanciones
El presidente de Ucrania Volodimir Zelenski hizo un llamado el domingo para presionar a Rusia y obligarla a detener los ataques y el conflicto en Ucrania.
“Sin una presión realmente fuerte sobre los dirigentes rusos, esta brutalidad no puede detenerse. Las sanciones ciertamente ayudarán”, dijo Zelenski en las redes sociales, pidiendo a Estados Unidos, a los países europeos y “todos aquellos que buscan la paz” que muestren “determinación” para llevar al presidente ruso Vladimir Putin a “terminar la guerra”.