Después de 20 años de haber sido creados, llegan a su fin los cinco los Comandos Conjuntos que tenían la capacidad de realizar operaciones en departamentos como Cauca, Chocó, Antioquia, Atlántico, Arauca, Casanare, Caquetá, Putumayo, entre otros. Su tarea era detener las acciones de grupos armados ilegales. De ahora en adelante, las operaciones ofensivas en el territorio nacional estarán en manos de cada comandante de fuerza, es decir: Ejército, Armada Nacional y Fuerza Aérea. Las tres fuerzas vuelven a trabajar de manera independiente.
Para Alejo Vargas, analista de seguridad y defensa y fundador del Grupo de Investigación en Seguridad y Defensa de la Universidad Nacional, la decisión es acertada porque era algo que se venía haciendo sin mucha organización.
“Es darle viso de realidad a algo que venía dándose y que no necesariamente va a ser negativo porque lo que hay que responsabilizar a cada una de las fuerzas para determinado tipo de operaciones”.
Para Jairo Libreros, profesor titular de seguridad y defensa nacional de la Universidad Externado de Colombia, acabar con los Comandos Conjuntos es un regreso perverso y tóxico al pasado y se regresa a las épocas de descoordinación militar que vivió el país en los gobiernos de Ernesto Samper y Andrés Pastrana.
“De un lado porque es liquidar sin pena ni gloria una institucionalidad que fortaleció la libertad de acción de las fuerzas militares para mantener la iniciativa operacional y del otro lado es concederles a los grupos armados ilegales una ventaja militar de ganar mayo control territorial por cuenta de la ausencia de mandos unificados”.
En Caracol Radio también consultamos a Jorge Mantilla, experto en seguridad y fronteras, quien aseguró que devolverle la independencia a cada fuerza, Ejército, Armada Nacional y Fuerza Aérea, puede ser una estrategia adecuada para la realidad del país.
“Podría decirse que lo que hay detrás de esto es la lectura de una nueva naturaleza de la amenaza con unos grupos armados cada vez más fragmentados y que, por tanto, requieren de unas operaciones mucho más rápidas y mucho más específicas y cuerpos de Ejército más ligeros”.
Esas modificaciones hacen parte de los cambios que quiere implementar el almirante Francisco Cubides comandante de las Fuerzas Militares, para buscar contrarrestar de una manera más efectiva las amenazas en Colombia.
