En estado crítico, en la Unidad de Cuidados Intensivos, sección de neonatos, permanece un bebé indígena de edad prematura que fue dado a luz en un andén de una residencia del barrio La Unión de la capital araucana el sábado pasado en las horas de la tarde por su progenitora que sufre de trastornos mentales.
Vecinos del sector que se percataron de la situación ayudaron a la mujer al trabajo de parto.
La situación mental de la madre del recién nacido hizo que esta abandonara el lugar y a la criatura, que quedó a merced del atónito vecindario, que trasladó al pequeño al Hospital San Vicente de Paúl donde recibió la atención adecuada.
El parte médico señaló que el bebé indígena observaba un grave estado de desnutrición, neumonía e hipotermia, como consecuencia del paupérrimo estado de salud de la joven indígena que lo gestó.
Lo preocupante de la situación, dice el parte médico, es que la ARS responsable de la atención médica de la nativa, Comparta, no quería responder en un comienzo y solo hasta el día martes decidió asumir lo pertinente, pues en la actualidad se hace necesario el traslado del bebé en un avión ambulancia a la capital del país.
Se conoció que al no aparecer ninguno de sus familiares el neonato pasará a disposición del Instituto de Bienestar Familiar en Bogotá.