La seguridad en el departamento de Arauca se ha venido consolidando pese a lo que el general José Rafael González Villamil ha denominado coletazos de la insurgencia, fue la conclusión del prolongado debate sobre temas de seguridad regional que se cumplió ayer en el recinto de sesiones de la Asamblea.
Los titulares de los organismos de seguridad en sus partes a los diputados asistentes a la jornada de trabajo revelaron los avances de la fuerza pública en su tarea contra el terrorismo y toda forma de delincuencia, aunque reconocieron que los pocos insurgentes que quedan en Arauca tratan de sacudirse con acciones esporádicas.
El general González Villamil señaló una zona específica que triangula un sector de los municipios de Tame, Saravena y Arauquita como la más crítica y donde el ejército nacional tiene centradas sus energías contra las agrupaciones rebeldes.
En los demás sitios del Departamento, precisó el alto oficial, las fuerzas militares ejercen control sobre las dos agrupaciones armadas que delinquen en la región.
En cuanto a las acciones de la Policía, el coronel Marlon Granados dio a conocer cifras estadísticas de homicidios en la región, la proyección de la Policía hacia poblaciones claves como Panamá, La Esmeralda y Puerto Jordán, así como nuevos programas para reforzar controles y cerrarles el paso a los actores armados y a la delincuencia en general.