Conmoción y revuelo general causó el pasado fin de semana la muerte en el municipio de Arauquita del Secretario General del Comité de Desplazados de esa localidad araucana, Carlos Rodolfo Cabrera Hurtas, de 35 años de edad y natural de la ciudad de Bogotá.
Las informaciones suministradas por las autoridades de la localidad precisaron que el hecho tuvo lugar hacia las 8:45 minutos de la noche del día viernes cuando Cabrera Hurtas fue sacado por sus agresores de su sitio de residencia ubicado en inmediaciones del barrio 20 de Julio.
De allí precisa la información, el Secretario General de la agremiación de desplazados fue trasladado a orillas del río Arauca por la vía que conduce a la Fundación El Alcaraván de la Vereda Campo Alegre, donde su verdugos le cegaron la vida de varios impactos de arma de fuego.
La muerte de este sacrificado dirigente gremial causó estupor en la comunidad arauquiteña, pues Cabrera Huertas gozaba de mucho cariño por los habitantes de la comunidad fronteriza por el papel que había desempeñado en cargos en el Hospital San Lorenzo, como concejal y últimamente como Secretario General del Comité de Desplazados.
El cuerpo de este dirigente fue sepultado ayer tarde, en medio del rechazo de la comunidad por estos actos violentos. A Cabrera Huertas le sobrevive su esposa y dos pequeñas hijas.