Incalculables son las pérdidas que han sufrido los sectores económicos de los siete municipios como consecuencia de la abrupta suspensión del suministro del fluido eléctrico, causado por un atentado terrorista contra la línea de conducción del sistema eléctrico nacional.
A pesar que muchos comerciantes de la región han acudido a las plantas generadoras de energía las pérdidas que han tenido que afrontar son inevitables, porque la mayoría de ellos carece de esta alternativa de solución parcial.
Los comerciantes afectados consultados ayer por Noticias Caracol manifestaron que ante estos hechos su frágil situación financiera los mantiene al borde del caos y no saben qué hacer debido al elevado número de compromisos con sus proveedores, pagos tributarios y otras obligaciones inevitables.