El expresidente de Perú, Alejandro Toledo, quien es acusado de corrupción y lavado de dinero por recibir millones de dólares de la constructora brasileña Odebrecht a cambio de licitaciones para obras públicas, llegó a Lima en un vuelo desde Los Ángeles y bajo custodia de agentes de la Interpol. En el aeropuerto internacional Jorge Chávez, fue recibido por fiscales y policías.
Por su parte, la Fiscalía de la Nación informó que la fiscal, Patricia Benavides, y el jefe de la Oficina de Cooperación Judicial Internacional y Extradiciones, Alfredo Rebaza, supervisaron la operación.
Toledo se someterá a un examen médico legal y un control judicial a cargo de un juez. Posteriormente será trasladado al penal Barbadillo, dentro del cuartel de la Dirección de Operaciones Especiales de la Policía, donde deberá cumplir 18 meses de prisión preventiva a la espera de que inicie el juicio en su contra. Los fiscales piden 20 años y seis meses de cárcel.
El exmandatrio se entregó a la justicia estadounidense el viernes, 21 de abril, en un tribunal federal en San José, California, para la fase final del proceso de extradición.