Un uniformado de la Policía Nacional resultó herido al activar la insurgencia una carga explosiva en la Finca Santa Isabel, entre las veredas Nubes A y Nubes B, del Corregimiento Todos los Santos, jurisdicción del municipio de Arauca, donde los efectivos realizaban un patrullaje de control.
El patrullero herido, quien hace parte del Escuadrón Móvil de Carabineros, EMCAR 21, que hacen parte de la seguridad de la Occidental de Colombia en campo petrolero de Caño Limón Coveñas, fue identificado como Libardo Cervantes Porras, quien fue trasladado hasta el hospital San Vicente de la ciudad de Arauca, donde recibió los primeros cuidados médicos.
Luego del atentado terrorista, las unidades policiales, realizaron operativos para dar con los responsables, al punto de capturar a dos jóvenes del sector, uno de ellos que hacía tránsito por el sector y otro sacado de una vivienda denunció a Noticias Caracol de La Voz del Cinaruco, los padres de los afectados.
Los capturados, según los datos suministrados por los mismos familiares, son Villamir Burgos Delgado y Darwis Orozco Castillo, ambos de 27 años de edad, quienes fueron conducidos hasta las instalaciones de la Estación de Policía en la ciudad de Arauca.
Jairo Burgos, edil del Corregimiento Todos los Santos, padre de Villamir Burgos Delgado, uno de los capturados, dijo a Noticias Caracol, que el atentado se registró sobre las 11:00 de la mañana del viernes, momento en la que se escuchó la onda explosiva del petardo activado contra la patrulla policial.
“La policía hace un recorrido en el vecindario, en unas casas cerquitas y llegaron a la casa mía y la allanaron sin los debidos permisos, registrando por todas partes y en ese resultado se traen a un hijo mío que le encontraron un par de botas de esas que usa la policía que venden aquí en Arauca, botas de segunda”, dijo el líder social al referirse al operativo de los efectivos de la policía.
Por su parte, Carley Orozco, padre de Darwis Orozco Castillo, expresó a Noticias Caracol, que su hijo iba en busca de un racimo de plátanos que encomendó la abuela a un predio cercano de la residencia y del sitio donde se registró el atentando contra la patrulla policial. “Hemos venido aquí porque no queremos que nos empapelen a los muchachos, ellos no deben nada, nosotros no somos culpable de lo que está sucediendo”, puntualizó señalando el angustiado padre.
Con la situación presentada, los dos padres se trasladaron hasta la ciudad de Arauca, hasta la oficina de la Personería Municipal y la Fiscalía, donde instauraron la respectiva denuncia.

