Ante las fuertes lluvias que sin parar cayeron sobre el Piedemonte Llanero y la sabanas el día anterior, dejaron inundados diferentes sectores debido al incremento de los cauces en los principales afluentes como el Margua, Cobaría, Cubugón, que tributan sus aguas al río Arauca. Cuerpos de Socorro realizarán este viernes un censo en las zonas afectadas.
Sectores como Puerto Nariño en el municipio de Saravena se encuentra en un 70% inundado por el afluente Caño Tigre que recibe las aguas del Banadía y se represa hacia este centro poblado, cubrió las calles, colegio, puesto de salud y viviendas que están sufriendo la inclemencia de las lluvias.
En Saravena, la quebrada La Pava sigue siendo motivo de preocupación porque está ubicada de una forma estratégica que cada vez que llueve se sale y afecta a la población, originando un desbordamiento masivo. Allí muchas viviendas resultaron inundadas por el fuerte aguacero que comenzó desde las once de la noche del miércoles y todo el día del jueves generando temor entre la comunidad.
En canoas han tenido que movilizarse algunos moradores debido a la cantidad de agua que está en las calles en sectores de Saravena, Arauquita así como algunos puntos de Fortul y Tame. En las áreas rurales de estos municipios muchas familias han perdido sus cultivos de pancoger, animales de corral y algunos semovientes que han sido arrasados por las fuerzas de las aguas.
Arauquita, este municipio del departamento que ha sido el más golpeado por la ola invernal, realizará este viernes una inspección y se tomarán decisiones si se declara una calamidad pública, es evidente que toda esta emergencia invernal paraliza las labores escolares de muchos jóvenes del área rural e incluso de los centros poblados que también se encuentran inundados como El Troncal en este municipio fronterizo.
Igual panorama pinta la trocha de La Soberanía en los límites con Norte de Santander, donde líderes comunales y conductores informaron sobre derrumbes y cierre de algunos tramos de esta vía, en sectores específicos como la vereda el Cedral vía Toledo – Chinacota, Miralindo, la vía Pamplona – San Bernardo que quedó reducida a un carril el día anterior ante la caída de piedras en algunos tramos, dificultando el paso de los pocos vehículos que se movilizan ante el paro camionero.
Por su parte, el eje vial Saravena – Cubará en Boyacá quedó restringida a un solo carril por los daños ocasionados por las aguas que se han ocasionado por los deslizamientos de tierras presnetados en esdte eje vial.
Finalmente los cuerpos de socorro atendiendo la situación se reunieron con los secretarios de gobierno de estas localidades y se acordó la realización de un censo para reportar de manera responsable estadísticas reales de las familias afectadas y de las damnificadas y poder tomar las medidas que se deben implementar para evitar una calamidad mayor.
