Sector de divisas y comercio reclaman respeto y piden intervención de la cancillería. Los colombianos y venezolanos que a esa hora del anuncio atravesaban los pasos fronterizos aceleraron su paso, se despidieron de sus familiares algunos llenos de incertidumbre con lágrimas y dijeron no saber qué va a pasar “esto no sabemos que pretexto tiene, en Venezuela así es todo, la dictadura impuesta por este señor”.
Pese a la situación los nacionales pudieron pasar en medio de las barricadas que fueron instaladas nuevamente por la guardia venezolana en los puentes Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander y quienes aumentaron su presencia en las infraestructuras que dividen a las dos naciones.
Mientras tanto el comercio formal rechazó la medida y advirtió desde Fenalco y la Cámara de Comercio que “ya es hora que la cancillería se pronuncie frente a la ausencia del Estado en la zona de frontera, y todos los problemas que se han venido suscitando”.
Carlos Luna presidente de la entidad gremial dijo “esto no es la frontera más segura, ni más dinámica ni la más comercial por el contrario los problemas se han agudizado y no hay respuesta del gobierno nacional”.
El sector cambiario rechazó los señalamientos del presidente Nicolás Maduro y demando del gobierno a través de la cancillería un pronunciamiento “no podemos permitir que se nos sigan lanzando toda clase de improperios frente a una actividad que se ha dado por tradición y con responsabilidad en nuestra región y que se nos acuse de algo que no hemos hecho ni estamos comprometidos” preciso un vocero de Asocambios.
La preocupación en el comercio es generalizada, frente a la atención que se venía adelantando a los venezolanos para su canasta familiar y al represamiento de bolívares que se han quedado del lado colombiano y que frente a la orden del gobierno venezolano causa un grave detrimento al sector de divisas y al comercio.
