Y es que tras la entrevista sostenida con el exalcalde y actual candidato a la Cámara Luis Emilio Tovar Bello, frente al mal manejo de los residuos sólidos en Arauca, no queda más que parafrasear el título de la obra de los escritores Jaime Lopera Gutiérrez y Marta Inés Bernal Trujillo: “La culpa es de la Vaca”, por la forma en que el dirigente se sacudió de los señalamientos hechos por la comunidad, manifestando que él solo fue un invitado de Emserpa, pero que no firmó ningún contrato.
El profesional Luis Emilio Tovar en nuestra segunda hora de noticias, habló sobre la creación de EMAAR, empresa que nació en su administración y que tiene en jaque a los araucanos, por la deficiente recolección de basuras que se evidencia y de cómo continua prestando sus servicios en el 2018, esta empresa que nació con muchas fallas.
El exmandatario comenzó haciendo un recuento de la compra del terreno en la vereda El Rosario para el relleno sanitario, compra que se dio en la administración de Carlos Raúl Suárez Castellanos, quien ejercía como Alcalde encargado ante la suspensión del titular, William Reyes Cadena.
Luego de la compra del terreno, se iniciaron las acciones para privatizar el servicio de aseo, que explica Tovar Bello, era lo más viable, teniendo en cuenta el informe presentado por el entonces Gerente de Emserpa Dumar José Quintero, ya que se venían presentando muchas pérdidas para la empresa de servicios públicos del municipio de Arauca.
Que el Concejo Municipal en las pasadas administraciones, había otorgado el poder de estas decisiones a la Junta Directiva de Emserpa, no teniendo injerencia el Alcalde directamente; que la decisión final fue del Gerente de Emserpa, sostuvo el hoy candidato a la Cámara de Representantes.
Señala Luis Emilio Tovar, que en su condición de máxima autoridad del municipio, solo fue un invitado y desde este ámbito legal no tiene ninguna responsabilidad frente al tema de Emaar, defendiendo su posición y manifestando, que si bien era el Alcalde, no es el culpable de las irresponsabilidades que hasta hoy viene cometiendo la Empresa de Aseo de Arauca.
Recordemos que son más de dos años de funcionamiento de Emaar en Arauca y la situación cada día es peor: los sectores periféricos del municipio se han convertido en basureros satélites; las calles, parques y avenidas están rodeadas de basura, porque no existe un coordinado control para la recolección, ni tampoco de la ruta establecida a los vehículos recolectores, ocasionando que los usuarios al sacar las bolsas con basura y no pasar la ruta recolectora, éstas queden al alcance de los perros callejeros e incluso de personas que las rompen por buscar algo que les sirva.
Por este incumplimiento en los horarios, por la falta de control del operador, que no exige el trabajo como debe ser, es que la capital de este departamento llanero está ad portas de un problema de salud pública y además de esto, en el contrato firmado quedó definido a 15 años el permiso ambiental, lo que mantendrá a esta empresa en la región, y donde según lo manifestado por la propia comunidad, dicho contrato quedó tan amarrado, que cualquier intervención o liquidación por parte de la administración municipal redundaría supuestamente en una millonaria indemnización a EMAAR.
Informe Auditoria de la Contraloría Departamental 2017.
Recordemos que el Informe final de Auditoría Especial-Ambiental realizado por la Contraloría Departamental, frente al cumplimiento del Contrato de Operación Especializada No. 135 del 2010, suscrito entre Emserpa y Emaar, es uno de los principales temas que para este 2018 liderarán los Concejales de Arauca.
Arauca no puede seguir colapsada por las basuras. Se reclama presencia de la Superintendencia y que el informe de Auditoría del pasado 28 de diciembre del 2017, compuesto por 36 folios, no pase desapercibido, es lo que sostiene el Concejal Oscar Franco.
Según la Contraloría Departamental, del 10 de marzo del 2016 al 14 de junio del 2017, la Empresa de Aseo de Arauca – EMAAR, recaudó la módica suma de 3 mil 121 millones 518 mil 328 pesos.
Pero si la empresa de aseo es rentable para los dueños, para los araucanos no lo es tanto, debido a la cantidad de basuras que permanecen regadas a lo largo y ancho de la ciudad capital, tiradas en bolsas que los perros callejeros y personas dejan rotas todas la noches.
Pues con todo esto y al no identificarse ni aceptarse responsables, ¿Será que la culpa es de la vaca?
