Desde la iglesia católica, el obispo de Arauca, monseñor Jaime Muñoz Pedroza rechazó los actos de violencia que se han presentado en el departamento, y lamentó profundamente el reciente asesinato del comerciante Henry Alejandro Estupiñán Álvarez.
“Hay momentos en los cuales el aprecio por la vida por los demás se pierde y a veces se relativiza y como se justifica la muerte de esta persona y creo que eso es lo que no está bien, en este momento se necesita recuperar ese valor que tiene la vida y de todo ser humano a imagen y semejanza de Dios”, indicó el prelado araucano.
Monseñor Muñoz Pedraza argumentó que la vida es un don de Dios y que solo a Dios le corresponde el momento de decir aquí llega la vida de cada uno por ese proceso natural.
El jerarca católico relacionó que se han aumentado los atentados contra la vida y eso es lo que hay que evitar, como la invitación que hizo el Papa Francisco, llamando la atención y señalando que la vida de todo ser humano por más delincuente que sea debe ser respetada y protegida.
Creo que es eso, cómo sensibilizarnos por el valor de vida, hoy tal vez es otra persona, pero mañana fácilmente puede ser un familiar, hasta nosotros mismos, de tal manera ese es el llamado a hacer algo, que nos concienticemos, que miremos el valor que tiene la vida de todo ser humano”, dijo el obispo saliente de la Diócesis de Arauca.