Un total de 90 eventos masivos en los que 28.509 personas, de 8.192 familias, fueron víctimas de desplazamiento forzado y confinamiento a causa de hechos violentos vinculados al conflicto armado. Según datos de la Defensoría de Pueblo, la principal causa de estos desplazamientos en el país fueron los enfrentamientos entre grupos armados ilegales que se disputan los territorios, y cometen otros delitos como amenazas, hostigamientos, estigmatización, homicidios, violencia sexual, riesgo y materialización de reclutamiento, territorios contaminados por minas antipersona y munición sin explotar, secuestro y desapariciones.
El informe revela que, en los departamentos de Nariño, Chocó, Antioquia, Norte de Santander y Córdoba, hay una crisis recurrente por el desplazamiento forzado y las víctimas no cuentan con garantías para el restablecimiento de sus derechos.
Los confinamientos en el país aumentaron en un 252% y el Catatumbo, Norte de Santander, fue el más afectado. Allí unas 33.627 personas (9.997 familias) fueron confinadas, a razón del paro armado impuesto por el ELN y EPL en el primer trimestre del 2020.
En la subregión del Baudó y Pacífico Chocoano, fueron 23.128 personas (5.210 familias) confinadas por los enfrentamientos entre el ELN, las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, los grupos armados organizados residuales y las disidencias de las Farc.
Por su parte el departamento de Nariño fue afectado tanto por el confinamiento como por el desplazamiento. En este territorio se reportaron 43 eventos en los que se desplazaron 14.048 personas (4.711 familias).
Según el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo, a esta crisis humanitaria por los desplazamientos y confinamientos, se suma la pandemia por el covid-19 y pidió atención urgente a las víctimas que no están siendo protegidas.