El juez Matthew Brann del Tribunal del Distrito Medio de Pensilvania en Estados Unidos, acogió la demanda presentada por Lawrence Delloye, el hijo de Ingrid Betancourt, quien como ciudadano estadounidense demandó a las FARC por el secuestro de su madre.
En un memorando presentado recientemente ante la Corte, Delloye alegó que «las FARC secuestraron y torturaron a su madre, conducta que viola la ley penal». Delloye también alega «que las FARC lo hicieron para intimidar y coaccionar a los gobiernos para que liberaran a los miembros de las FARC·. Además, argumenta que las FARC secuestraron a su madre fuera de la jurisdicción territorial de los Estados Unidos», dice el documento.
Por lo tanto, presentó un reclamo en virtud de la ATA, la Ley Antiterrorista. Antes esto, el juez ordenó al exgrupo armado a pagar una suma de 36 millones de dólares para resarcir los daños luego de que Betancourt permaneciera en cautiverio por más de seis años.
La demanda incluye los nombres de 14 miembros de la organización, entre ellos varios cabecillas de las disidencias de las FARC, como Iván Márquez. Queda la duda de ¿Cómo se hará el pago de esta demanda a la familia Betancourt y de donde saldrá el dinero?.
Según el memorando, Delloye había solicitado en principio 12 millones de dólares, antes de triplicar los honorarios y costos de abogados.
En su declaración, Delloye da fe de cómo el secuestro “destruyó su sentido de confianza, la confianza en la vida y en los demás, menoscabando su capacidad de mostrar afecto y recibir amor, la tortura psicológica y al abandono emocional por la ausencia de su madre”.