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Obispos de Apure y Arauca analizan crisis venezolana y posible llegada masiva de ciudadanos



Analizar una posible afluencia mayor de personas provenientes desde territorio venezolano al departamento de Arauca tras la crisis que se vive en el vecino país, fue la reunión que hicieron el obispo de la nueva Diócesis de Guasdualito en el Alto Apure venezolano, junto al jerarca de la iglesia en Arauca, reunión que también contó con la participación de ACNUR de ambos países.

 

La jornada de trabajo que se cumplió por cuatro horas, se realizó en la Diócesis de Arauca, donde monseñor Jaime Muñoz Pedroza, como anfitrión recibió a la delegación venezolana encabezada por monseñor Pablo Modesto González Pérez y el personal de ACNUR, junto a sacerdotes de ambas diócesis.

El jerarca venezolano, dijo que la situación que se torna difícil en su país se ha convertido en un desafío, por lo que tras la reunión se analizó las dificultades que está afrontando Venezuela tras 42 días de protestas continuas.

“Este encuentro ha sido una bella oportunidad para buscar maneras de apoyarnos en caso de necesidad y esta situación que estamos viviendo, agradecemos la convocatoria que nos han hecho desde aquí, como ACNUR como una manera de hacer frente a situaciones de emergencia que se están planteando”, señaló monseñor González Pérez.

Según lo manifestado por el religioso cada vez se multiplican las situaciones de personas en el campo de la medicina, la ayuda médica asistencial, el de las personas que están pasando necesidades. “Ahorita con todos los paros que hay en Venezuela, el traslado de alimentos de una lado a otro se convierte en una limitación que dificulta cada día más el acceso a los alimentos a nuestra gente”, acotó el religioso venezolano.

Reveló monseñor González Pérez, que en Venezuela y en poblaciones del centro del país y la frontera es cada vez más limitado los alimentos, medicinas, el combustoble, por lo que se teme que la comunidad tenga que recurrir a las poblaciones fronterizas colombianas a abastecerse, por lo que temen que esta situación se puede agravar aún más.

Argumentó en señalar el obispo titular de Guasdualito que la situación es aún más grave en la ciudad de Caracas donde se percibe la agresividad de la gente, lo que no pasa en la zona de frontera, considerando que se está en una crisis humanitaria por la falta de medicinas, combustible y la alimentación que cada día se torna más difícil, por lo que la gente está viendo la oportunidad de alimentos en los puntos fronterizos.

ACNUR por su parte, ofreció sus buenos oficios para apoyar, recibir personas y coordinar con la iglesia católica en Arauca las situaciones que puedan darse de emergencia. “En este momento son acuerdos para seguirnos apoyando, acordamos hacer otra reunión para ver cómo se va moviendo la crisis y ahora en este momento estamos integrando fuerzas para atender coyunturas que podrían agudizarse en el tiempo”, puntualizó señalando el bispo de Apure, monseñor Pablo Modesto González Pérez. 

 


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